Open AI y Google protagonizan una semana histórica para la inteligencia artificial
Open AI y Google protagonizan una semana histórica para la inteligencia artificial
Open AI y Google han realizado anuncios que marcarán un hito en la historia de la inteligencia artificial. Esto ha dado inicio a una guerra entre las grandes empresas tecnológicas, y hasta ahora, los principales perjudicados parecen ser los millones de trabajadores que entrenan modelos de IA, así como los creadores de contenido y los medios de comunicación.
Sin embargo, para el usuario común, esta situación parece ser un paraíso. Están agradecidos y entusiasmados con las infinitas posibilidades que ofrecen tecnologías como ChatGPT-4 y Gemini. Ya no necesitan hacer clic en videos, artículos o libros para encontrar la información exacta que buscan; un asistente virtual lo hace por ellos. A pesar de esta comodidad, esta situación ha llevado a una disminución en el tráfico orgánico hacia los sitios web desde los motores de búsqueda, lo que está provocando la inevitable desaparición de algunos modelos de negocio.
La gran pregunta que surge es cómo van a monetizar los creadores de contenido si los usuarios ya no hacen clic en los sitios web o en los videos. Sundar Pichai, CEO de Google, tranquiliza al respecto, afirmando que la empresa está constantemente pensando en esto y ha invertido mucho en enfoques que generen valor y tráfico de regreso.
Durante una conferencia ofrecida a medios internacionales, incluyendo WIRED en Español, en Mountain View, California, después del Google I/O, Pichai explicó que Google ha mejorado constantemente la experiencia del usuario y que estos demandan diferentes experiencias. Asegura que la gente siempre querrá la riqueza de la web y que eso siempre formará parte del enfoque de la empresa. Además, desmiente la suposición de que las personas tienen un número fijo de preguntas, argumentando que la gente tiende a profundizar más en la información a medida que obtiene respuestas, y que los sitios que aparecen en las vistas generales de IA obtienen más tráfico que si solo fueran un enlace tradicional.
Los asistentes virtuales y los buscadores como los conocemos están cambiando para siempre
Durante la última década, hemos sido testigos del surgimiento de asistentes virtuales como Siri, Alexa o Hey Google, los cuales, si bien poseen capacidades limitadas para responder preguntas y controlar dispositivos conectados, han sido parte de nuestra vida cotidiana. Simultáneamente, desde finales del siglo pasado, los motores de búsqueda han simplificado la búsqueda de respuestas y la oferta de servicios y productos según las necesidades de los usuarios. Sin embargo, ambos servicios enfrentan un futuro incierto.
El equipo de Google está inmerso en el proyecto Astra, una iniciativa que busca desarrollar asistentes digitales basados en inteligencia artificial capaces de comprender y responder al mundo de manera similar a como lo hacen las personas. Demis Hassabis, CEO de Google DeepMind, ha expresado que han trabajado en mejorar la percepción, el razonamiento y la capacidad de conversación de sus modelos, así como en optimizar la naturalidad y calidad de las interacciones. El siguiente paso es mejorar los tiempos de respuesta, la capacidad de retención de información y la comprensión del contexto por parte de los algoritmos.
Los avances recientes de OpenAI, Google, Meta y Microsoft están transformando estos servicios al integrarlos en una plataforma unificada. Esta nueva generación de inteligencia artificial no solo será capaz de dialogar de manera natural y fluida como un ser humano, sino que también podrá analizar y comprender documentos en diferentes formatos, como textos, imágenes o videos, en una variedad de campos. Además, podrá ofrecer respuestas y soluciones complejas y ejecutarlas en nombre del usuario, mejorando significativamente la eficiencia y la precisión.
Por otro lado, OpenAI ha presentado GPT-4o, un nuevo modelo disponible tanto para usuarios gratuitos como de pago. Entre sus numerosas mejoras, que incluyen tiempos de respuesta más rápidos, una capacidad de memoria optimizada y un mejor análisis de imágenes, destaca una voz para las conversaciones que busca emular la de un humano real. Sam Altman, CEO de OpenAI, expresó su sorpresa ante la capacidad del modelo para parecerse a la inteligencia artificial de las películas en una publicación reciente en el blog de la empresa.